¿Hubo vida en marte?

Hay a quien le gusta pensar que sí... (sigue leyendo)

1 comentario:

Ignacio Bernabeu dijo...

¿Hubo vida en Marte?
Hay a quien le gusta creer que sí.
Sobre todo a HG Wells cuando en 1948 hizo creer a medio mundo que los marcianos nos invadían a través de una emisión de radio. Pero no vamos a abordar esta cuestión de modo en que se pueda opinar, sino más bien, lo más asépticamente posible.
En el campo de la biología, suele existir una ecuación ya conocida por la mayoría de los lectores. H2O = VIDA. Por eso, los científicos insisten tanto en localizar agua en todas y cada una de las misiones espaciales que se dirigen al planeta marte.
Ya se ha descubierto agua, sí. Pero en estado sólido. Es puro hielo. La temperatura en marte es tan baja que la mantiene en forma de hielo constantemente sobre todo en los polos. Aunque también es cierto que existe una foto en la que los analistas creen observar unas gotas de agua en estado líquido en las patas de la sonda phoenix.
Entonces, si la temperatura de marte no permite el agua en estado líquido ¿tiene sentido seguir buscando? La respuesta es que sí, por varios motivos. Debido al aspecto que presenta la superficie de Marte, evidencia que en el pasado hubo mares y océanos de agua en estado líquido. Así que debió existir una temperatura mucho más cálida y una atmósfera más densa.
Esto pudo propiciar la existencia de microorganismos, o incluso primitivas formas de vida.
Otro de los “indicios” que apuntan en la dirección de que el planeta rojo albergó vida en el pasado, es el famoso meteoro hallado en la Antártida en 1984 proveniente de Marte. Se estima que Marte recibió el impacto de un meteorito unos 16 millones de años atrás que expulsó al meteorito ALH 84001 fuera del planeta y, después de vagar por el espacio exterior, llegó a la Tierra hace unos 13,000 años.
Coincidió con la Extinción masiva del Holoceno. Fue la extinción sostenida y generalizada de especies que abarcó desde mamuts hasta el propio hombre de Neanderthal. Pero no encendámos las alarmas. La extinción no tuvo que ver con el meteorito, demasiado pequeño para causar estragos. De hecho, el candidato más probable para el adebacle Neanderthal fue el Homo Sapiens Sapiens…

Volvamos al meteorito. En 1996 la NASA anunció que una posible primitiva forma de vida microscópica podría haber quedado fosilizado en dicha roca.
Aunque dos años más tarde la revista Science Magazin rebatió esta posibilidad.

La versión que pone en duda que el rastro se deba a la procedencia de microorganismos fosilizados, se basa en que hay pruebas claras de contaminación del hielo antártico circundante en el meteorito.
La versión que defiende esta postura apunta a que el análisis de otros muchos meteoritos hallados en la Antártida no aporta evidencias de fósiles bacterianos, moléculas orgánicas ni otros compuestos de origen biológico como ocurre con el ALH 84001.

•Además se hallaron determinados hidrocarburos en el interior del meteorito mientras que la ausencia de los mismos en la corteza del meteorito parecen indicar que estos compuestos no se deberían a la contaminación del hielo circundante.
Abierta la polémica, podemos aferrarnos a lo que más nos guste.


Otras pistas son la presencia de gas metano detectada en la atmósfera de Marte en 2003, lo cual es considerado un misterio, ya que bajo las condiciones atmosféricas de Marte y la radiación solar, el metano es inestable y desaparece después de varios años, lo que indica que debe de existir en Marte una fuente productora de metano que mantiene esa concentración en su atmósfera, y que produce un mínimo de 150 toneladas de metano cada año.